¿DÓNDE SE APRENDE A CONOCER LOS VALORES HUMANOS?

Primero en el hogar.

Los integrantes de la familia a través de su forma de ser nos los muestran y es allí donde nuestros padres, abuelos y otros familiares nos hablan de ellos.

Los maestros en la escuela también tienen la oportunidad –y la obligación- de señalarlos en la relación entre los alumnos.

¿Por qué decimos, entonces, 
que los valores se van perdiendo?

No es así. 

Lo que sucede es que 
“no se valoran suficientemente los valores”.

Y eso es justamente lo que hay que enseñar: 
a valorarlos.

Si no lo hacemos irán sí desapareciendo,  
que es lo que no queremos que pase.

Por suerte están en nuestro nuestro corazón

y en nuestra mente. 

Sólo falta tenerlos presentes, nombrarlos, mostrarlos, valorarlos, dándoles la importancia que tienen e integrarlos a nuestra vida de todos los días.

“Los valores humanos son los más altos de 
la creación y el desarrollo futuro de la humanidad dependerá de ellos”.

Ellos, a su vez, dependen de nosotros.

De vos, de mí, de todos.

Este es el objetivo del Movimiento por los Valores Humanos.